Hablemos del Dragón

Tiempos, donde se recurre a la misma disyuntiva por elegir la verdad, elegir un bando, elegir una postura, una idea, un pensamiento, la contra posición de ideas, de argumentos llevan siempre a los dos hemisferios, en vez de la unidad, la disparidad, la disonancia, la división, la discordia. ¿Quién es mejor?

¿Cuál es la mejor idea?

¿Cuál es la mejor postura para lograr el progreso de una nación?

Contra cualquier tabú, miedo, lo impronunciable; 

China rompe paradigmas.

China ha suscrito un plan para convertirse en 2030, en la potencia vanguardista del mundo, líder en inteligencia política, tecnológica, militar, de inteligencia artificial. Así lo viene logrando.

Para los Chinos, desde hace tiempo, el socialismo es el camino indicado para lograr el progreso. Varias guerras se han suscitado a raíz de esto. 

Una discrepancia y una guerra se ha desprendido de ello. Sin embargo, los Chinos han suscrito desde hace poco tiempo, convertirse en los mejores del mundo. Así viene ocurriendo, así sucede, así es.

El periodista Heniz Dieterich ha marcado que la guerra comercial "trade war" entre Estados Unidos de Norteamérica con China se puede definir como una guerra de contención imperialista. 

Por mi parte, yo creo que es muy tarde para que China ya no tenga la mayor influencia sobre el nuevo orden tetrapolar: EU-China-Rusia- India. 

Recordemos que China tiene una alianza estrecha, estratégica y amigable con Rusia y con India, y que además le favorece su posición geográfica, cosa que Estados Unidos encuentra ya muy difícil de obtener. De hecho, podemos sentenciar que Estados Unidos de Norteamérica es un país que ha quedado aislado frente a la supremacía que encabeza China en un bloque muy difícil de contener y de competir junto a Rusia e India. 

Apuntemos, la alianza de China, Rusia e India con los países con mayor petróleo del mundo. 

En primer lugar, Venezuela es el país con mayor reserva de petróleo crudo en el mundo. Es el primer lugar. Venezuela se escribe con "P" de petróleo, y ante su grave relación y crisis con Estados Unidos de Norteamérica, Venezuela cuenta con una relación amigable, estable y comercial poderosa con China y Rusia, de igual forma con Irán. Eso, es factor de rabia para Estados Unidos de Norteamérica en estos momentos, por eso urge poner un gerente que atienda al norte, en Venezuela.

Estados Unidos de Norteamérica tiene un panorama complicado, que no ha sabido solventar más que con guerras. Venezuela no lo quiere. Arabia Saudita está más cerca de los otros, China y Rusia. Rusia es aliado estratégico de Alemania, además. Canadá tiene petróleo, por eso EUA puede continuar favoreciéndose en esa relación, pero ahí también inciden los franceses, y los ingleses. Luego en cuarto lugar con mayor reserva de petróleo tenemos a Irán, en guerra. A Irak, en quinto lugar, en guerra. Luego en sexto lugar a Kuwait. Después está Rusia, Emiratos Árabes, Libia y Nigeria.

Ante este escenario, lo peor que puede hacer ver EUA al mundo, es su rabia y nervios ante la amenaza del dragón.

China, por su parte, ha ganado ya el terreno de ser el líder mundial en tecnología de inteligencia artificial y militar. Es uno de los objetivos del dragón para alcanzar al 2030, sin embargo, ya toca ese terreno.

De igual forma, Rusia supera a Estados Unidos en tecnología militar. La asociación entre China y Rusia, acaba por socavar cualquier plan de Estados Unidos de Norteamérica, que puede continuar chantajeando por su política comercial a Europa de Occidente de sancionar con aranceles si estos voltean a ver o hacen negocios y alianzas estratégicas con Rusia y China. Lo mismo ha pasado con México. Por eso incluso, el presidente López Obrador ha dicho bien, que de haber querido la confrontación y la guerra comercial, México hubiese ganado. Por supuesto, México puede en cualquier momento determinar acabar con grandes comercios con Estados Unidos y gestar alianzas más poderosas con Rusia, India, China y Europa de Oriente y Occidente. Por ello, es importante marcar que es de tal suerte, encontrar que Estados Unidos de Norteamérica no se puede dar el lujo de tratar como cualquier cosa a México. Sin México hoy, Estados Unidos tendría una caída libre en su economía y además estaría por quedar completamente eliminado de la contienda y de cualquier grado de incidencia sobre el nuevo orden mundial. México, ante este escenario, del cual muy poco se tiene en cuenta dentro de la comentocracia y del análisis político por geo estrategia mundial, coloca a México como nuevo referente de la dinámica de orden económico global. Y aún más, cuenta con más poder político, al convertirse en el factor diplomático de equilibrio del continente, al ser contención de intereses negociados y de relaciones entre el Norte, centro y sur de América.

Ante tal amenaza, el Presidente Trump sigue marcando a México como el enemigo, pero porque tiene miedo, y porque ese discurso intimidatorio le haría ver como si tuviese un poco de poder, pero al contrario, Trump recibió un Estados Unidos de Norteamérica quebrado, en crisis, en bancarrota. No obstante, acaba de aplaudir el T-MEC aprobado en México, de relaciones comerciales con Estados Unidos de Norteamérica y con Canadá. El propio Trump acaba de aplaudir el nuevo tratado comercial que hizo y aprobó México, y el propio Trump impulsa ese mismo tratado en su país exhortando al congreso a que lo apruebe. Por eso hace lo que hace. Está tratando de salvaguardar un barco que se hunde, y México debe ser un aliado, y lo hace Trump marcándole de enemigo. Es su juego mental. Así mismo, México tampoco debe ser indiferente ante su continente, y ante su posición geográfica. En este punto, es de reconocer la posición política que se ha mantenido elegante ante las majaderías de Trump y su presidencia para salvaguardar la relación. Geo-políticamente, y de forma estratégica, a México le conviene apostar por continuar teniendo una relación estable y cordial con Estados Unidos, porque además es parte inminente de nuestro territorio y de nuestra alianza, y ante tal principio, Trump se equivoca y continúa equivocándose con tratar de tomar distancia, de forma agresiva y poco diplomática de México. 

Indudablemente, las principales metrópolis de México deben seguir de cerca lo que hace China, y de igual forma, encaminar un plan de desarrollo que sea incluyente con todos los municipios que ya han sido alcanzados por la mancha urbana y metropolitana en varias regiones industriales de México que hoy exigen proyectos inmediatos para solventar las apremiantes nuevas realidades que ya han alcanzado a miles de ciudadanos que estaban acostumbrados a otro mundo, más contaminado, saturado de tráfico, sin respeto y sin alternativas para la movilidad social.

Este año viajé a la ciudad de Guangzhou (Cantón), tercer ciudad más grande de China,  detrás de Pekín y Shanghái. Es una ciudad al sur de la república popular de China y ahí constaté la verdad. Guangzhou, ciudad de las flores, representa la vanguardia en desarrollo urbano, medio ambiental, político, social de un país de primer mundo. Es emblema de lo que China se ha propuesto. Y sin miedo propaga su cultura socialista que lleva al progreso. Los chinos, en la ciudad de Guangzhou cuentan con uno de los aeropuertos más modernos del mundo, hecho para ejecutivos, hecho para promover el comercio y recordemos que los Chinos son los comerciantes por excelencia en el mundo. Así es la realidad del dragón. 

Lleno de vegetación, en Guangzhou, ciudad de las flores, cuenta con aire limpio, y la urbanización y desarrollo inmobiliario más vanguardista que hay en el mundo. En su aeropuerto, en sus calles, en su vivienda, palpas, miras, observas, el desarrollo tecnológico que tiene esta ciudad, emblema del dragón, emblema del gran país super potencia. 

Respeto a los ciudadanos, en movilidad, en ciencia, en tecnología, en medio ambiente. El gobierno forja su principal impacto e imagen ante el mundo en demostrar en cómo trata a sus ciudadanos. 

La cultura milenaria se encuentra latente, y permea dentro de la cultura de los Chinos, amabilidad y servicio, progreso, alianza, fraternidad y solidaridad bajo la misiva de seguir promoviendo el socialismo, que en occidente se ha satanizado. 

Guangzhou es la ciudad histórica por tradición para hacer comercio con el gran dragón. Cuentan ya con una feria desde la antigüedad para hacer comercio, porque tienen uno de los puertos más importantes del país para lograr gestar sus acuerdos comerciales con el mundo. Es así, que Guangzhou, es emblema del progreso y de lo que hoy por hoy es China, la primer potencia del mundo, en vanguardia que ha logrado todo, bajo la presunción de ser un régimen "socialista".

Es irónico, pero sin duda, China ha roto el paradigma. Visitarlo, palpar su realidad, es un asombro indescriptible. Es fundamental, porque han marcado rumbo, por su liderazgo mundial de qué hacer ante los nuevos retos globales de combatir cambio climático, atender fenómenos migratorios, combatir la pobreza, y dar paz social a nuestros pueblos.

China, por la vía del socialismo,
hoy es líder del mundo.

Erick Xavier Huerta S.