«El Oligopolio de las Telecomunicaciones»

«Si lo hacen otros, nosotros también.»
Recuerdo que Estados Unidos de Norteamérica cuenta con grandes retos, una suma cuantiosa de más de 50 millones de pobres, casi cifra similar a la de México, que oficialmente registra más de 60 millones de pobres más los que huyeron del país al norte por causas de violencia y pobreza en busca de una vida mejor.
Además, Estados Unidos de Norteamérica ya suma varios casos de inestabilidad mental entre sus jóvenes donde acuden fácilmente a conseguir armas y terminan masacrando a su comunidad, a sus escuelas, a sus vecindarios.

Pero lo que importa es el tema de telecomunicaciones y si en Estados Unidos de Norteamérica dos grupos comandan el mercado de las telecomunicaciones, entonces en México también hay que hacerlo. De igual forma, lo mismo se ha buscado replicar en todo sector, en todo rubro, basta recordar el caso político, porque en Estados Unidos el duopolio es el mejor sistema capitalista y político que puede haber, aunque a pesar de las grandes producciones cinematográficas, siga una realidad que no se quiere asumir, el crecimiento de la pobreza, de la violencia y de la bancarota.

Aquí en México, todavía no se comprende qué hacer para regular el tema de las telecomunicaciones y evitar que sigan creciendo los monopolios, los duopolios y los oligopolios, porque uno, dos, tres apellidos manejan al país en el tema que más información confidencial recopila de los usuarios.

Julio Di Bella fue director de PCTV hasta que Grupo Megacable fue a comprarlo.
PCTV es una productora y comercializadora de televisión que administra a varios proveedores de televisión por cable y produce señales de televisión por suscripción bajo la denominación de TVC NETWORKS. PCTV surgió con el fin de representar a la industria de los cable operadores en la república mexicana frente a los programadores extranjeros que cobran en dólares. PCTV era un representante comercial del gremio del país para obtener buenos precios y así beneficiar al consumidor mexicano. Sin embargo, acabó siendo plataforma política para sus dirigentes y luego un artífice para fortalecer a los amigos del oligopolio.
Di Bella ha recibido tres veces el premio nacional de periodismo. Ha dirigido también a canal once.
Julio Di Bella estuvo dirigiendo PCTV hasta que saltó con intenciones a posicionarse en el gobierno federal de la mano de Josefina Vázquez Mota, ya habiendo además tenido experiencia en colaborar con el gobierno de Vicente Fox y con Felipe Calderón.

Ha sido el gran estratega del PAN.
En 2012 se unió a la campaña de Josefina Vázquez Mota, y el resultado fue desastroso. En 2017, volvió a apoyar a Vázquez Mota en sus intenciones para ganar la gubernatura del Estado de México y resultado volvió a ser desastroso. Luego renuncia al PAN y se va con José Antonio Meade, y el resultado otra vez fue desastroso. En estas colaboraciones políticas, los resultados después de las contribuciones de Di Bella en el PAN y en el PRI han marcado los peores resultados electorales de estos partidos políticos, el duopolio político de México.

Así que Enrique Yamuni, director de Grupo Megacable, entró a comprar PCTV en 2014, justo cuando Di Bella deja la dirección de PCTV para emprender más política en el duopolio de poder.
Cuando Enrique Yamuni compra PCTV, se firma un acuerdo con IFT (Instituto Federal de Telecomunicaciones) para adquirir las acciones de la empresa PCTV—así se dio a conocer a través de la bolsa mexicana de valores (BMV). De esta manera Megacable aumentaría en 66% el control de su compañía de contenidos para TV restringida.


Megacable es el mayor operador de televisión restringida en el país, compró a PCTV y usó a PCTV para saber todo y estar de cerca de las pequeñas y medianas empresas cable operadoras del país.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones es el encargado de regular el espectro de las telecomunicaciones en México, pero en realidad, no se ha visto mucho, menos con estas medidas. Pues la adquisición de PCTV por parte de Megacable, con respaldo del IFT, presumía una normatividad que daría certidumbre a todos los socios de compañía que adquirió Megacable, pero otra fue la historia y el gobierno otra vez quedó burlado.

Muchos cable operadores dependen económicamente de PCTV porque ellos han distribuido y distribuyen más de 60 señales internacionales como discovery, disney, ESPN, MTV, MGM, Telefórmula y los contenidos de TVC Networks y más. De manera que los socios dependen de esta distribuidora, casi por obligación, sino, no compites. Pero ahora, esto trabaja más para grupo Megacable que para cualquier otro socio.


Previamente, Grupo Megacable y Televisa ya habían sido sancionados y acusados de ejercer prácticas monopólicas por la extinta comisión federal de competencia. Recuerden el programa YOO, la oferta de Televisa y Megacable para competir contra Dish de Slim y así segmentar el mercado.
Supuestamente Grupo Televisa y Grupo Megacable rompieron relaciones, porque Megacable quitó de su oferta los contenidos de Televisa y Televisa quitó de sus sistemas la oferta de contenidos de TVC NETWORKS. Sin embargo, los dos se unieron para conseguir que CFE les otorgara 22 mil kms de fibra óptica para sus operaciones y además aún continúan seduciéndose porque Televisa quiere comprar a Megacable. Y se necesitan porque saben que Slim, TELMEX Y América Móvil representan una fuerte amenaza para sus intereses. Pero ahí está repartido el pastel, entre Grupo Televisa, Megacable y Slim y Salinas Pliego.

Cuando adquirió Grupo Megacable a PCTV, poco tiempo después, en 2015,  lanzó una propuesta denominada «PCTV integra» y reunió a los cable operadores del país para ofrecerles una alianza con fin de fortalecer a la industria, al gremio y así fomentar la competitividad y gestar un ganar-ganar con la comunidad empresarial de las telecomunicaciones en México. Sin embargo esas buenas intenciones y patriotismo quedó en eso, en buenas intenciones. Nunca ocurrió. Yo asistí, y recuerdo también el temor de los cable operadores a ser timados por Megacable y acabar siendo arruinados y despojados de su negocio. Ahí los directivos se comprometieron y dieron su palabra de que  la alianza era completamente ética y moral, pero no fue así. Sí ocurrió lo que muchos temían, la información de PCTV y sus acciones siempre eran para beneficiar a Grupo Megacable. Terminó Megacable entrando a cada plaza de sus socios registrados en PCTV. Pero, Megacable no entra a competir en territorio de Grupo Televisa (IZZI), de manera que hay un entendimiento, y una asociación, entre ellos, entre grandes, y la industria y las pequeñas empresas y medianas empresas, no importan.
¿Ha notado eso el Instituto Federal de Telecomunicaciones?
¿Es equidad que un agente preponderante económico del ramo entre a poblaciones chicas a competir contra empresas chicas sin atender entrar a competir contra iguales en otro territorio?
Ellos saben todo. PCTV podía auditar a quien quisiera, y tenía multas a la mano, y sanciones, e información confidencial de usuarios y suscriptores en cada región del país. Megacable usó eso y terminó por entrar a competir con sus socios, pero eso el IFT no ha marcado para nada dentro de sus análisis por fomentar la buena competencia, no la desleal. A mí me parece que esto es un claro ejemplo de lo que es competencia desleal en el marco de las telecomunicaciones en México. Cómo una empresa de mayor penetración en el país usa a una representante del gremio para acabar favoreciendo sus intereses de crecimiento violando todo código ético moral de competencia económica.

Lo mismo pasó con la extinta CANITEC. La Cámara Nacional de la Industria de las Telecomunicaciones por Cable en México era representante legal para defender el estado de derecho, del gremio, y contribuyó justamente a esta era de convergencia, pero acabó, de nuevo, sirviendo a los intereses solamente de Grupo Televisa y de grupo Megacable. Y desapareció. Después de usarlo, lo tiraron a la basura.

La competencia desleal es una serie de prácticas económicas agresivas usadas para obtener ventaja sobre los competidores de manera deshonesta, y si vamos a plantear bajo los propios argumentos del foro económico mundial y de la OCDE, medidas para implementar a evitar prácticas monopólicas a través del regulador oficial de la federación, el IFT, entonces hay que tener claro lo que está sucediendo y no continuar omitiendo la falta de equidad en competencia cuando uno sigue asumiendo acciones de violentar al estado de derecho y de querer burlar a la autoridad.

Hemos visto, dumping, engaño, denigración, confusión, dependencia económica, desviación de clientela como prácticas regulares y permitidas por la autoridad, cuando son justamente los marcos de la competencia desleal. ¿Dónde está entonces el regulador? ¿Dónde están entonces los marcos para permitir el fomento a la competencia? ¿Dónde está la pugna por la asequibilidad, la competencia y la cobertura?

Se ha hablado de que hay que tener cobertura total en el país en materia de telecomunicaciones. Pero no ha pasado. Ante este hecho, el Presidente Andrés Manuel López Obrador ha manifestado que ya se dio oportunidad a los cable operadores de realizar la tarea, por lo cual ahora el gobierno federal entrará como un nuevo actor proveedor. Sí, pero esperamos que esta tarea de Gobierno Federal sea para fortalecer al gremio, al territorio y haga crecer la industria a través de empresarios en el ramo que están dentro del espectro del emprendimiento, de la clase media, de la clase en crecimiento, de la clase generadora de empleos y no de las mismas familias y de los mismos grupos de poder. Por eso, acudir a solventar deficiencias con grupos trasnacionales como Facebook, da mucho qué pensar. Sin embargo, si Facebook está para potenciar alianzas público privadas con fin de incrementar la conectividad, se puede considerar entonces una buena ruta de crecimiento económico y cierre de la brecha digital.

Si el nuevo gobierno entonces quiere crear una nueva empresa de telecomunicaciones pero con fines de hacer alianza con todo el pequeño gremio que desaparece poco a poco, será una buena ruta para levantar nuevamente a la industria y defenderse del acaparamiento de los grupos monopólicos del país.

Recordemos pues que si cerramos la brecha digital, por ende, cerraremos la brecha económica. Mayor conectividad genera mayor economía, mayor crecimiento. Es una máxima, pero si se atiende resolver siempre con los mismos agentes preponderantes económicos en el ramo, continuarán los vicios de seguir favoreciendo un marco donde pocos sean y sigan concentrando la riqueza y muchos y muchos más queden sin oportunidades de crecimiento.

Concentración no es competencia.

Erick Xavier Huerta


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