El Fascismo del Partido Acción Nacional en Guanajuato

La ingobernabilidad del partido hegemónico que habita el poder en Guanajuato, manifiesta a través de la voz expresa de su representante como gobernador, Diego Sinhué, «que no saben de lo que somos capaces los Guanjuatenses» ante el temor de que por fin, en un esquema democrático, se erradique un grupo que promueve el desgobierno y que goza con poca legitimidad. Tanto es así, que por orden suya, sus empleados y lacayos en distintas instancias al servicio del partido en el poder, comienza a hacer alarde en las redes sociales, de que están con su gobernador, al tiempo de que asesinan a otro regidor de la oposición, del partido MORENA, al que dicen y señalan de no saber gobernar.

La palabra fascismo proviene del latín "fascio" que significa —grupo político.
En el fascismo las personas son vistas como un paquete que debe ser controlado por medio de la fuerza. Hoy, hasta hay una alianza entre Carteles del Crimen con esta pandilla en el Gobierno que buscan eso, controlar a la gente y robarse sus recursos. En las pasadas elecciones, el fascismo de Acción Nacional eso hizo, mostrar que no hay posibilidad de destituir su régimen y la rabieta que ahora presumen ante la federación, es por mucha de la impotencia que hay de haber quedado fuera de un pacto que venían logrando con el PRI, desde que este último les dejó ascender en Guanajuato con Carlos Medina Plascencia en 1991.
Sin cuestionar, con obediencia absoluta y sin crítica. Así se les ve desde el rango más abajo hasta el más encumbrado. Superan la estructura hegemónica del PRI, a ese que criticaron con demagogia para acabar replicando y reeditando su sistema demagógico que encubre con maquillaje de democracia su dictadura perfecta. Ya lo dijimos, es tanta la réplica, que los resultados de la dictadura del PRI en el Estado de México por cien años, ahora se superan por un cuarto de siglo en el Poder de parte del partido acción nacional en la entidad Guanajuatense. No opinan, no critican, sólo obedecen y replican los mensajes de defender a su grupúsculo que promueve la permanencia de la desaparición de poderes en el estado donde el cura Hidalgo gritó: ¡Muera el mal gobierno!

Fascismo no es definido por el número de víctimas, sino por la forma en que se les mata.

El fascismo exclama la unidad como discurso ideológico. En Guanajuato, todos estamos con el PAN, yo estoy con mi gobernador, yo formo parte de esta idea de ser un solo grupo. A diferencia de Marx, que escribe la lucha de clases sociales como premisa fundamental de la dialéctica social.

El fascismo, como se es conocido, se fraguó en épocas de Benito Mussolini para establecer una ideología, un movimiento político y un Estado de carácter totalitario y anti democrático. Este mismo sistema se difundió a lo largo del territorio Europeo, en las entre guerras de 1918-1939. Aquí, en México, se padece una guerra brutal desde el resurgimiento de los Cárteles y descontrol que permitió Vicente Fox. Incluso, Felipe Calderón rompió relaciones diplomáticas, políticas con su antecesor, Fox, por el despilfarro y desorden que le heredó para comandar a la nación. Y de tal suerte, Felipe Calderón determinó declarar una guerra frontal contra el crimen organizado. Es decir, mismo escenario, en que México quedó inmiscuido en un escenario, de entre guerras, y guerrillas, y guerra civil en un Estado que hoy se encuentra quebrado, perpetrado por el crimen organizado. Políticos como Romero Hicks hacen alarde de que el Presidente López Obrador deba darse una vuelta a Guanajuato para observar el estado de gobernabilidad, aunque no se es necesario cuando todos los días empresarios, civiles y políticos son asesinados y acribillados y salen en notas nacionales causando revuelo en toda la república.

Y siguen, en Guanajuato, sometiendo a los diputados a velar por los principios de la cofradía ultra derechista. El ochenta por ciento de la población se encuentra en pobreza. Pero pobreza no es una palabra referente para los panistas y allegados que osan en gastar su tiempo libre en conversaciones mundanas y banales, bebiendo alcohol y burlándose de la situación real de estado que desde la propia federación, causaron los miembros del Partido Acción Nacional.

El descaro revela el fascismo de los miembros menos representativos del Partido Acción Nacional en su régimen fascista en la entidad. Y es que sin pensar, ni razonar causas y motivos, los fieles seguidores han  sido permeados por la pérdida de libertades como camino idóneo para respaldar el fascismo. Siguen enarbolando y protegiendo, promoviendo a toda costa su preferencia por la pureza racial, el odio a judíos, a masones, a homosexuales y a comunistas. Buscan esterilizar a los indígenas y mediante la clase empresarial, construyen el mensaje contundente de su doctrina ideológica que representa la superioridad de una clases social sobre otra, la más pobre, la obrera. Tanto así que propios gobernadores aplauden esa misiva en sus formaciones de nuevas generaciones, que acaben sirviendo a la clase superior, que deviene del extranjero, de unas cuantas marcas, de todo lo privado.
Esto no es nuevo, pero siempre vale la pena recordarlo.

Álvaro Delgado ganó el premio nacional de periodismo, justo también por revelar la Organización Nacional del Yunque, el grupo en Guanajuato ultra católico, anti comunista, anti semita, anti liberal, y con rasgos absolutamente fascistas.

Hay propias bromas en la cultura de los panistas en Guanajuato de burlarse de que, quienes son morenos, estarían en los partidos de los "pobres", que se encuentran en la izquierda, y de tal manera ahora hacen esas pequeñas bromas que rondan en las redes, maquillando a López Obrador, de que si fuese panista, sería rubio.

Ahora, el propio Gobernador Diego Sinhué añadió su política de construir prepas militarizadas, al cabo que también de la propia milicia que comandó el partido acción nacional, surgieron los Zetas, el Cartel del Golfo y el Cartel Jalisco Nueva Generación.
Incluso, ya es conocido, de facto en investigaciones periodísticas, de la alianza entre el Gobierno panista de Diego Sinhué con el CJNG para derrocar al Marro. A pesar de esto, varios alcaldes surgidos del apoyo del Cartel de Santa Rosa de Lima continúan impunes y en funciones de gobierno, a pesar de haber sido descubiertos de saber fraguar los robos a los recursos públicos federales.

¿Cómo entonces puede pretender el régimen fascista del Partido Acción Nacional que la federación confíe en ellos, si sus diputados, sus alcaldes, han sido descubiertos en saber cómo robar los recursos públicos de la federación destinados al desarrollo de la entidad?—Esto, no lo sabe contestar el gobierno corrupto de Diego Sinhué en Guanajuato. Y es así, que todo asesinato, lo criminalizan para engordar la carpeta de la impunidad y que nadie les diga nada.

Asesinaron hoy a otro funcionario. Un regidor más asesinado. Y seguramente harán con su caso, lo que hicieron con el estudiante asesinado días atrás en la Universidad Politécnica del Estado de Guanajuato, y lo que hicieron también con otros desaparecidos, y con otras mujeres asesinadas. Criminalizar. Sí, si te matan en Guanajuato, eras un criminal. Ahora acribillan y asesinan a empresarios connotados, pero ahí guardan silencio, porque para el fascismo del PAN hay que cumplir con los principios de Estado totalitario: destrucción de partidos, sindicatos, democracia y voto porque se consideran factores inútiles y se aboga entonces por un partido político único como sistema de gobierno.

Para que ocurra más el fascismo, se debe apostar por eliminar el disenso. El funcionamiento social debe acatarse por una rígida disciplina y apego a cadenas de mando. Por eso empleados y seguidores, pegan por doquier lo que les mande el gobernador, y el mensaje es claro: «ustedes están conmigo». El fascismo tiene en sus nociones de principios llevar a cabo lo que hace Sinhué, promover la educación castrense, el arraigo a su partido y estado por medio de un fuerte aparato militar. Los fascistas creen eso, en que la sociedad deba estar armada, comandada por un gobierno marcial y niegan que la violencia tenga repercusiones negativas; al contrario, ayuda a limpiar, y la violencia política, la guerra y el imperialismo son medios utilizados para conseguir la reconstrucción y restablecimiento del orden social. Así lo hizo por su parte, directamente, Felipe Calderón, quien por cierto renunció al PAN por no darle la candidatura a su esposa.

Ahora el PAN, regresa a la tumba política de Fox para revivirlo como redentor, sin la más absoluta prudencia y respeto que entraña haber sido ya Presidente de la República y además de haber fungido como el sátrapa promotor del gobierno del PRI de Enrique Peña Nieto.

Vicente Fox respaldó y resguardó el peor gobierno, el más corrupto de la historia, a ese PRI de Javier Duarte y César Duarte, y de Rodrigo Medina, y de más de quince gobernadores acusados de corrupción. Ese es Vicente Fox, que en su regreso fue aplaudido por Romero Hicks, por el dirigente Marko Cortés, por Santiago Creel.

Tanto es la consigna anti liberal de los panistas fascistas en Guanajuato, que siguen permeando por la intervención y la economía mixta, en control absoluto de ellos, sin fiscalización para seguir construyendo sus negocios jugosos al amparo del poder. Y mientras tanto, quienes ya robaron y se les escuchó felices en audio por haberlo hecho y por ahora servir como consejeros y guías de nuevos alcaldes para enseñarles a robar, siguen impunes.

El fascismo es una unidad monolítica de poder. Así Diego Sinhué dice: «lo que digo se hace» no saben de qué somos capaces en Guanajuato. Si digo que va por otros diez años Carlos Zamarripa, en el congreso no discutan, sirvan, obedezcan y cumplan; y así se hace en todos los demás rubros. Es el corporativismo, donde sirve la coparmex, el club de industriales, el club de toby. Transportistas y restauranteros, que exaltan esta idea de poder frente a individuos o clases. Suprimen la discrepancia política en beneficio de su partido único, y el localismo lo dirigen en beneficio de su centralismo. Tal es el caso, que su consigna por enaltecer ahora el principio de obediencia, de fascistas, para que cumplan las masas, lo logran con la conformación de una sola entidad, socioespiritual indivisible. Nos une la religión católica, a pesar de ser el Estado con más homicidios en el mundo, y con más agravios y asesinatos a las mujeres, a los niños y a los jóvenes. Sin desarrollo humano, la juventud osa gastar tiempo en enajenar su conciencia con drogas, alcohol y violencia.

El fascismo es expansionista y militarista. La FSPE, los jóvenes de prepas militarizadas, el mando único, y la demagogia del cambio y golpe de timón son elementos claves para redondear una visión panorámica del fascismo que ocurre en Guanajuato y de las bases del Nazismo que ya se ha documentado, fueron parte de las semillas para conformar al Partido Acción Nacional de manos de uno de sus fundadores: Manuel Gómez Morín. No al tanto, tal vez sean elementos clave para saber y comprender el por qué todos los hijos del Maquío acabaron renunciando al Partido Acción Nacional, además también porque el propio partido no respaldo a Clouthier en el fraude del 88, y en ese tiempo, se quedó solo enfrentando la batalla y el destino al poco por venir, le encontró muerto.

El fascismo es el PAN de Guanajuato, que sigue a cabalidad el sistema de régimen político que indica cómo llevar a cabo este encuadramiento y orden unitario de la sociedad que se halla en crisis dentro de una dimensión dinámica y trágica, promoviendo la movilización de masas por medio de la identificación de las reivindicaciones sociales con las que ocurren en la nación.

La dictadura, dijimos, no es el régimen de Hugo Chávez, ni de Nicolás Maduro, ya ni del PRI. La dictadura es el Partido Acción Nacional en Guanajuato. Es tiempo de decirlo, es tiempo de señalarlo. No es un juego, es delicado y más porque se estuvieron resolviendo en burlarse siempre por sus pactos inconfesables con el PRI, desde el fraude que respaldaron con Carlos Salinas de Gortari hasta su pacto con Peña Nieto.

Ein Volk, ein Reich, ein Führer!

«¡Un Pueblo, un Imperio, un Líder!»

Lema de la Alemania nazi

Erick Xavier Huerta S.