Solidaridad e Internacionalismo

«Y si todos fuéramos capaces de unirnos...¡qué grande sería el futuro, y qué cercano!»

Después de que se fracturaran las relaciones diplomáticas, gracias al PAN de Fox y Calderón (mismos que fueron expulsados y renunciaron a su militancia en el PAN) con el país de Cuba, Enrique Peña Nieto regresó a intentar salvar la relación, cosa que se consolidó con el gobierno de López Obrador.
Y es que después de que el PRI y el PAN apostaron por ser gerentes de la agenda impuesta desde Washington, y lo que se requería en México era una auténtica soberanía. Y el liderazgo y legitimidad con el cual triunfó López Obrador, le convierte hoy en uno de los más grandes líderes del mundo, y en la historia política de México. Eso le ha llevado a hacer valer la soberanía de nuestro país. Eso le ha valido hoy sostener grandes relaciones diplomáticas con todos los pueblos del mundo. Porque no se trata de compensar y sostener solamente una relación con un solo hombre, como cuando el fanatismo de Fox con Bush, ó el de Calderón con Uribe.

El Presidente López Obrador siempre ha manifestado que no busca la confrontación con ningún pueblo, a lo que arremeten los violentos panistas que buscan castigar y ser comparsas del intervencionismo norte americano para verse un poco más como miembros de un club al cual no pertenecen: el de los imperialistas.
Gracias al Presidente López Obrador, el gobierno de Donald Trump tuvo que dimitir en sus agresivas confrontaciones con nuestro pueblo mexicano, cosa que permitió el gobierno gerente de Washington encabezado por Enrique Peña Nieto. El Presidente López Obrador se lo manifestó así directamente al mandatario Donald Trump, "los seres humanos no abandonan sus pueblos por gusto, sino por necesidad"; y gracias a este diálogo que se abrió entre los dos mandatarios, comenzó un trabajo gubernamental de relación bilateral para impactar multilateralmente en la región de América, y mitigar el fenómeno impulsado por la miseria para revertirlo por el incremento en mejoras a las condiciones de vida que no han habitado en los pueblos de América Latina. La pugna de López Obrador, desde la perspectiva de todos los proyectos que ha venido emprendiendo es clara, que el paisano se vaya por gusto y no por fuerza.

Porque, desde la perspectiva de los programas implementados del proyecto de nación de López Obrador, es construir un país con dimensión social. López Obrador hizo un enérgico mensaje al presidente Trump, haciéndole ver que Estados Unidos no puede ser primero cuando por encima de las fronteras nacionales, lo que verdaderamente prevalecerá, es la justicia y la fraternidad como valores universales.

«Nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho». Así, Andrés Manuel López Obrador ha logrado un gobierno que rescate la diplomacia mexicana, ahora con buenos entendimientos y grandes relaciones con todos los países del mundo, entre ellos, las dos potencias que ahora viven tremendas discrepancias y conflictos, me refiero a China y a los Estados Unidos de Norteamérica.

Y ha venido a reforzar el multilateralismo, en tiempos de pandemia, recuerde el gran logro, hazaña histórica para México desde que la diplomacia dejó de ser un fuerte para la república gracias al panismo, en su decena trágica. México mostró su liderazgo ético y humanitario en su labor diplomática de misión en la ONU, en una estrategia que impulsó la misión de cuerpo diplomático mexicano en la ONU para la cooperación en beneficio de permitir que se tenga un acceso global a medicamentos, vacunas y equipo médico para enfrentar al COVID19, una iniciativa que adoptó y logró sumar a más de 179 estados en el mundo; así lo dio a conocer la asamblea general de la ONU en la misión de estar unidos frente a la pandemia de COVID19. Se trata de la propuesta más votada en la historia de la diplomacia mexicana; se dice fácil. Pero gracias a esta iniciativa de López Obrador se logró limitar el monopolio de insumos médicos y vacunas contra el coronavirus, así beneficiando a las personas más vulnerables en el mundo.

El planteamiento de Obrador en Naciones Unidas fue respaldado de 179 países y eso nunca había ocurrido.

Claro que hay una cuarta transformación, y la diplomacia mexicana es un ejemplo claro de ello.

Erick Xavier Huerta S.