«De frente al futuro»

 

«De frente al futuro»

Ricardo Anaya tacha pasado y presente, para hablar consistentemente del futuro de México, del futuro que representaría su opción de gobierno. ¿Pero de cuál futuro estamos hablando con Anaya? ¿Hablamos del futuro donde Anaya aseguraba que el PRI ya se iba del poder y ahora el PAN los ayuda a permanecer? ¿Hablamos del futuro que representa el PAN en México? Ese futuro ya lo probamos, y también su contubernio, unión y alianza al PRI, y al PRD. En el futuro del pasado, Ricardo Anaya era diputado plurinominal, se apropiaba del PAN, aprobaba todas las reformas de Enrique Peña Nieto, las aplaudía y luego desconocía sus actos de complicidad con el PRI gobierno corrupto que encabezaba Peña Nieto. ¿De cuál futuro estamos hablando Anaya? ¿Hablamos del futuro de Fox y su traición a la democracia? ¿Hablamos del futuro de los amigos de Fox? ¿Hablamos del futuro de los hijos de Martha de Fox? ¿Hablamos del cambio fallido del PAN después de la dictadura del PRI para dar

continuidad? ¿Hablamos del futuro sangriento que nos esperaba con Felipe Calderón? ¿Hablamos del futuro del amasiato entre PRI y PAN con Peña Nieto? Habla de futuro Ricardo Anaya, como una posibilidad de un México que soluciona todo a través de las nuevas tecnologías, donde habita la prosperidad y el desarrollo. Sin embargo, ya probamos su futuro con los mismos que forman parte de su cuadro de poder: Vicente Fox, Jorge G. Castañeda, Romero Hicks, Enrique Alfaro, Diego Fernández de Cevallos, Santiago Creel, César Nava, Jesús Zambrano, Javier Lozano. ¿Hablamos del futuro donde Diego Fernández de Cevallos pasaba años sin pagar el predial de uno de sus magnánimos ranchos en Querétaro? ¿Hablamos del futuro que le deparó a Veracruz bajo el gobierno de Yunes Linares? ¿Hablamos del futuro que le deparó a Chihuahua con Javier Corral? ¿Hablamos del futuro que nos esperaba a Guanajuato después de Miguel Márquez Márquez con Diego Sinhué? ¿Hablamos del futuro de Guanajuato que seguía en espiral ascendente de violencia desde los tiempos de Vicente Fox al frente de la presidencia de la república? ¿Hablamos del futuro violento y homicida en que se convertiría Guanajuato bajo la dictadura perfecta del PAN? ¿Hablamos del futuro del PAN con Elvira Paniagua en Celaya Guanajuato? ¿Es el futuro donde el PAN abona a la crisis y no a su resolución? El futuro ya ocurrió. Ya probamos esa posibilidad con los cuadros del PAN. El futuro no existe, es una posibilidad, y dentro de las posibilidades lo que encontramos fundamentalmente es crisis, porque la crisis es el pivote primordial que da parte al crecimiento, al desarrollo. Lo único que existe es el presente, y hoy vivimos las consecuencias de las decisiones y del camino que nos trazó la capacidad limitante ó incapacidad que demostraron los gobiernos del PRI y del PAN para resolver las crisis. Pero hay que saber resolver la crisis, no agravarlas. En ese sentido, sabemos que con los gobiernos del Partido Acción Nacional la crisis se agrava y no se resuelve, la pobreza se incrementa, la violencia se incrementa, la corrupción se incrementa, la injusticia y la impunidad se incrementan, y la democracia se pierde. Gracias a los futuros de esos gobiernos y supuestos liderazgos del partido acción nacional, vino la cultura de los moches, del abuso, del influyentismo, de la deshonra. Aprendieron las malas prácticas del PRI y hasta las superaron, y no sólo eso, hasta se aliaron hoy con ellos, a los que señalaban justamente de no saber hacer las cosas. Y por otro lado, también se sumaron a los perredistas, a quienes calificaban de ser la industria de la reclamación y de poseer las peores ideas. ¿Cuál futuro? El futuro que nos esperaba con el PAN era convertirnos en el país más peligroso para vivir, lugar donde se perdían libertades, democracia, bienestar y paz social. El futuro que nos esperaba con el PAN era un México con los mayores índices de corrupción, impunidad y peligro para ejercer el periodismo. Esta es una gran diferencia entre lo que ha representado el futuro con López Obrador, y lo que ha significado el futuro con los de siempre. Con López Obrador sí vinieron ideas vanguardistas a las que criticaron, calificaron de erróneas pero al final, acabaron copiando todos los gobiernos de la república: sus segundos pisos, las pensiones a adultos mayores, política social, sus propuestas rumbo al gobierno federal. Con López Obrador sí vino un nuevo acuerdo social y movimiento por la transformación de la república en beneficio de todos. Y es que aquí la base social en el movimiento de López Obrador es incluyente y mayoritaria, cosa que los que ya nos demostraron el futuro, perdieron.

El cambio es hoy, no ayer en el futuro que presumen los que ya abusaron del poder.

El cambio se está construyendo en este presente, con un nuevo pacto con el pueblo de México, el que sí sabe lo que ha sucedido, al que sí le importa su soberanía y su libertad.

Erick Xavier Huerta