PAN: INICIO DEL DECLIVE Y FIN DEL REDUCTO.

 

PAN: INICIO DEL DECLIVE Y FIN DEL REDUCTO.

Hablemos del desastre en Guanajuato, por gobiernos del Partido Acción Nacional. Hablemos de Celaya donde no pudo gobernar Martha Fox ni su hijo Fernando Bribiesca.
Y es que la situación en Celaya es reveladora, por su cercanía con Querétaro, por su representatividad en Guanajuato, lugar donde la gente no resiente ningún bien por las presunciones de inversión de armadoras automotrices extranjeras para dar empleos de mano de obra, muy mal pagados. ¿Por qué en el lugar cumbre de inversiones prefieren miles de ciudadanos enfilarse al crimen organizado? ¿Por qué si el PAN presume tanto bienestar hay tanta drogadicción? ¿Por qué el estado es el más violento del país? ¿Por qué Celaya representa uno de los lugares más peligrosos para vivir en el continente? Mendoza Márquez gobernó del 2000 al 2003, desde el PRI, y luego vino Pepe Rivera, Gerardo Hernández, Rubí Laura, Ismael Pérez, Ramón Lemus y Elvira Paniagua. Ahora quiere el PAN que vaya uno de los de cepa priista, el señor Mendoza Márquez quien amagó en 2018 estar en contra del panismo desde la bandera independiente. Y ahora Mendoza Márquez promete cambios desde el mismo panismo que provocó esta crisis. Esta decadencia ubicada en Celaya Guanajuato sobre la clase política nos habla del deterioro de las instituciones panistas en todo el estado; no obstante este es el reducto del PAN que había venido sobreviviendo por sus pactos con el PRI federal y esta repartición política que hacían de la república desde Los Pinos. Pero el pacto ha terminado, y Andrés Manuel López Obrador sabe muy bien cómo operaron en 2018 una campaña en contra suya para favorecer cueste lo que cueste al entonces candidato de movimiento ciudadano, PRD y PAN, Ricardo Anaya. Tanto hace poco vino otra vez Ricardo Anaya, a Celaya para presumir que el gobierno panista hace mejor las cosas que cualquier otro,—sí, en la ciudad emblema del desgobierno, de la impunidad y del crimen. Hoy, todavía Guanajuato sigue siendo la cuna de operaciones y conspiración para desestabilizar al gobierno de Andrés Manuel López Obrador y quitarlo del poder (aunque ya llegó a la mitad de su período con gran aprobación mundial y nacional).

El desastre que ha provocado la ingobernabilidad del PAN en Celaya, es sombra que cubre a toda la región del corredor industrial, pasando por Cortazar, Villagrán, Salamanca, Irapuato; desde Apaseo el Grande hasta León; y San Miguel de Allende, San Felipe, San Luis de la Paz. Celaya ha sido el emblema mayor de cómo el PAN no sabe gobernar. A los estudiantes universitarios les falló, a los ciudadanos, a los empresarios, a los inversionistas. Ex diputados federales representantes de Celaya en el pasado reciente, hoy son diputados locales por otra región, representando a Valle de Santiago, a Cortazar, a Jaral del Progreso. Salvatierra. El gobierno desconocía si habían fosas clandestinas, y luego desestimaron el tema, para “no hacer tanto ruido”. Pero el primer objeto de un gobierno es asegurar la paz. Aquí hay Centro Fox, y la casa del expresidente Fox, y lo vienen a visitar Juan Carlos Romero Hicks, Jorge Castañeda, Ricardo Anaya, pero no hay paz, hay violencia. Y es que es inminente un cambio, porque las estructuras de gobierno necesitan renovación, redirección, transformación, sino quedan estancadas y el proceso de putrefacción de acelera. No podemos permitir que nuestra democracia sufra mayor putrefacción que la que ya ha padecido en Guanajuato en la última década. Este año es el principio del fin del reducto de poder del PAN, así se respira, así se siente en el clima y atmósfera de la opinión pública.

Erick Xavier Huerta