Botero

Visité el museo Botero en Bogotá, Colombia, situado en La Candelaria en el centro histórico y cultural de la ciudad, capital financiera y política del país de Colombia. 

Fernando Botero, donó una numerosa colección de obras al país de Colombia. La colección que se exhibe en Bogotá es soberbia y admirable. En Medellín hay todavía más de la extensa colección y obra de Botero. Admirable verdaderamente.

Fernando botero fue un gran destacado coleccionista de arte. Tenía sus obras de colección regadas por el mundo, en Nueva York, París, Montecarlo, Pietrasanta, Suiza. Al tiempo, Botero era también un gran pintor.

Fernando Botero es uno de los grandes. Su obra es tremendamente significativa y portentosa, su pintura, su escultura es digna de admirar. Es un universo por completo, una cosmovisión tremenda la que imprime Botero en su obra, con sentido del humor, con sentido de humildad, con sentido tremendo de apreciación por la belleza. Sale del estereotipo, y toda su obra resulta divertida, con un gran sentido del humor y un gran sentido de romanticismo y amor. 

No solo su universo es excepcional, sino que se potencia más con la tremenda riqueza de la colección de otros artistas como Monet, Miró, Bacon, Picasso, Renoir, Dalí, Beckmann. Este museo alberga colecciones públicas de arte internacional que lo han ponderado como uno de los mejores a nivel internacional y de tremenda importancia en todo el continente americano. 

De hecho, la curaduría del museo fue realizada por el mismo Fernando Botero y pienso que este factor es fundamental y determinante para que la experiencia del recorrido por cada sala haya sido de forma exponencialmente enriquecedora. Todo tiene sentido y hay una mayor exploración de nuestros sentidos en la forma en que armó y construyó la atmósfera de cada sala en sintonía con la colocación de cada obra que resuena profundamente con cada espejo de todas las demás obras de arte que se acompañan por el recorrido. Hay una sinfonía tremenda en el arte que te cobija paso a paso por esta experiencia del Boterismo.

Es una experiencia inolvidable.

Erick Xavier Huerta