Contraataque


En una época de narco-cultura, del crimen como estilo de vida, llega una producción de Netflix para reivindicar la imagen del ejército mexicano y sus unidades especiales en contra del narcotráfico. 

Indudablemente parecería una producción total de parte del ejército mexicano para revindicar su imagen frente a la narco-cultura que ha corrompido todo y mina toda imagen de toda institución pública en el gobierno federal. La película es impecable, tiene una súper producción y un gran casting. 

La película además, ahora, contraataca, como su nombre lo dice, a los políticos como los gestores principales de la corrupción que están en mancuerna con el crimen. Lo único que le queda al Estado Mexicano para poder salvaguardarse, es el ejército, porque además el ejército cuenta con unidades para poder sobreponerse ante cualquier embate, en la situación más crítica. Estos son los mensajes de contraataque. 

La película, además de servir como propaganda para el ejército mexicano, es un mensaje de antemano de la guerra que se está librando actualmente contra los carteles del narcotráfico en México, y se les advierte, en nuevos tiempos, bajo la presidencia que ahora tiene Claudia Sheinbaum, que habrá mano dura a pesar de los políticos que intenten sabotear las operaciones. 

Esta película está protagonizada impecablemente por Luis Alberti, Leonardo Alonso, Noé Hernández, César Antulio y Mayra Batalla. 

El Capitán Armando Guerrero, es el líder del grupo conocido como Murciélagos, quien debe ayudar a luchar contra los integrantes del cartel «el enjambre». El Enjambre comete abusos desmedidos en zonas rurales y municipales.

La película además retrata una situación peculiar que está ocurriendo en México. La guerra como tal no está ocurriendo porque no hay los grandes ejércitos disputándose los territorios, sino que esta es la guerra de guerrillas, comandos especiales contra comandos especiales; en este caso el enfrentamiento retratado que hace el grupo «muerciélagos» contra el grupo especial de enfrentamientos del cártel «el enjambre», pues todo grupo del narcotráfico, aacude a bajas de militares para formar sus grupos especiales de mercenarios y acabar de pronto con la amenaza de ser atrapados y que el ejército mexicano desarticule las operaciones del cartel. La película se mira bastante nutrida de asesores especiales que narran los tipos de operativos del ejército mexicano en busca de desarticular las operaciones de los carteles comenzando con aprehender a los jefes de las organizaciones. 

La película además también, implica la comprensión de los muertos por los enfrentamientos, porque son de vida o muerte, no hay espacio para la salvación, o muere en grupo en combate, o muere el otro grupo, pero no se salvará más quien aniquile totalmente. 

Indudablemente es una película, y es ficción, y estos grupos en consecuencia se basan en la historia actual que se padece en México; pero sin duda, una forma de reivindicar la imagen de una institución que ha buscado y que sostiene la operatividad del Estado Mexicano. Hay violencia expresa y decenas de fosas comunes donde los Carteles depositan los cuerpos de sus víctimas. 

Ahora, hablemos de la coincidencia de la ficción con la realidad, y entonces podamos comprender que se trata indirectamente de un mensaje central y frontal contra enemigos del ejército mexicano. Es la advertencia de que van por todo. 

En este mes de marzo, ha ocurrido el despliegue de la operación bastión, en seis municipios del sur del Estado de México, Amatepec, Luvianos, Sultepec, Tejupilco, Temascaltepec y Tlatlaya, sí, este pasado 28 de marzo. Estas tareas de seguridad fueron parte de la ofensiva para debilitar a miembros y líderes de «La familia Michoacana», uno de los grupos delictivos con mayor presencia en la región. 

Como en la película, los líderes del cartel, eran hermanos. En esta historia real ahora, que narramos, durante esta jornada de operación bastión, se incluyeron cateos simultáneos y se aseguraron 21 inmuebles presuntamente utilizados por la organización criminal, donde se encuentran ranchos, casas de descanso, bodegas, puntos de vigilancia. Los líderes de esta célula son identificados como José Alfredo y Johnny Hurtado Olascoaga alias “El Fresa” y el “Pez” respectivamente. En este operativo participó la secretaría de la defensa nacional, la secretaría de marina, la guardia nacional, el centro de inteligencia y la FGJEM y la secretaría de seguridad del Estado de México. En este mismo operativo, se aseguraron armas, vehículos, equipos de comunicación y documentación vinculado a las operaciones del grupo delincuencial en la región más importante en el sur mexiquense. 

En Contraataque, el Cartel se llama «El Enjambre». Pero Sheinbaum, en la vida real, lanzó «Operación Enjambre»—el primer golpe de Sheinbaum contra la colmena de la corrupción en México. 

Así como en la película, la unidad especial del ejército descubre que los traiciona un secretario de gobierno vinculado al narco. En la vida real, operación enjambre, tuvo una redada contra siete funcionarios acusados de coludirse con el narco, y eso ha dado oxígeno a la estrategia contra la violencia y manda un claro mensaje de que se va a tolerar el contubernio entre delincuentes y autoridades (así como en la película). 


Omar García Harfuch, secretario de seguridad pública, mandó claro mensaje con este operativo de que la corrupción no será tolerada y ha pedido con ello un voto de confianza para la estrategia gubernamental contral el crimen, anclado en fortalecer las labores de inteligencia y la coordinación entre autoridades. Esta operación resultó en una estrategia que vino poniendo la mira a siete funcionarios en activo, que cayeron después de que la fiscalía estatal les siguiera la pista durante meses por sus vínculos y los anillos de protección que brindaban al crimen organizado. 

Se capturó a Rodolfo Chávez, director de seguridad de Ixtapaluca, un municipio conurbado a Ciudad de México. Se detuvo a María Elena Martínez Robles, alcaldesa de Amanalco, acusada de ordenar el asesinato de otro funcionario del ayuntamiento, el síndico Miguel Ángel Lara.

Martínez Robles dio el salto de MC, Movimiento Ciudadano a Morena, poco después de las elecciones y Lara, su antiguo compañero de militancia, la acusó de imponer a cargos en el directorio municipal de su nuevo partido, a pesar de que había ganado con el partido naranja. 

Amanalco, es municipio cercano a la zona turística de Valle de Bravo.

El “Fresa”, capo ligado al grupo criminal intentó apagar el conflicto. Por su parte, el esposo de la alcaldesa panista de Tonatico, Ellery Guadalupe Figueroa, también fue acusado de tener nexos con la Familia Michoacana. Figueroa ocupaba la dirección del DIF. Otra parte de la historia, dejó la escena del director de seguridad de Texcaltitlán, Isidro Cortés, que se suicidó con su pistola, antes de que fuera desarmado por los agentes que le leían su hoja de cargos. 

Sheinbaum declaró que “aquí hay investigación e inteligencia”.  David Saucedo por su parte, en el momento señaló que esto es una advertencia muy necesaria a los alcaldes de todo el país que han colaborado con el crimen organizado. 

Analicemos.

¿Y tú qué opinas?

Erick Xavier Huerta S. 


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